La viñeta retrata a Franco y Queipo de Llano entre los brazos de la muerte. En la parte superior aparecen varios militares golpistas (Cabanellas, Yagüe, Mola y Sanjurjo) y en la parte inferior se amontonan multitud de cuerpos de civiles muertos. El texto comenta que Franco está a punto de suicidarse tras ver el horror que ha sembrado a los dos años de “consumada la magna felonía que tiene sumida a toda España en el dolor y la tragedia.”
Franco is dramatically crying over the death of Pope John XXIII. The Generalissimo is standing on a pile of skulls and bones. In the pile of bones, Aragonés places banners with the names of those who died defending democracy during the Spanish Civil War, died in exile, or were assassinated under Fascist rulers.